lunes, 26 de abril de 2010

CUBA ROBAINA


"Bicho no come mierda"

La fama y la leyenda de Alejandro Robaina no eran gratuitas. Este guajiro de sabiduría natural e ingenio lapidario era el auténtico rey del tabaco cubano, o lo que es lo mismo, el rey del mambo: el número uno de verdad. Falleció el pasado 17 de abril, a la edad de 91 años, en las mismas tierras rojas y fértiles de San Luis, en Vuelta Abajo, la localidad de Pinar del Río adonde llegó su abuelo canario a mediados del siglo XIX y donde él aprendió todos los secretos de la tierra. Allí levantó las vegas míticas que hoy llevan su nombre.



Comenzó a trabajar la tierra con su padre a los nueve años, y en ese momento, cuando ni tenía ni zapatos para calzarse, empezó a fumar. No lo dejó hasta poco antes de morir, y el calibre de su fuma era de cuatro o cinco brevas diarias, siempre torcidas por él mismo. Solía decir que el tabaco era cosa de familia. Conocía cada planta de su tapado (invernadero), y cada hoja de cada planta, y cada bichito de cada hoja, que espulgaba a mano. "La tierra hay que amarla y el tabaco hay que mimarlo como si fuera un hijo, por eso este cultivo es de pequeñas familias", solía decir a quien le visitaba en su casa. Eran multitudes, desde príncipes a estrellas de rock, pasando por embajadores y premios Nobel.


Una vez Fidel Castro trató de convencerlo de la conveniencia de cooperativizar las tierras dedicadas al cultivo del tabaco, que hoy siguen siendo privadas en más del 85%. "Él quería que las tierras de tabaco estuvieran en grandes cooperativas, y que yo fuera presidente de una. Pero el tabaco tiene que ser familiar. Estuvimos discutiendo 32 minutos sobre el asunto. Lo último que me dijo fue: '¡Carajo, qué viejito este!", recordó en una entrevista el año pasado.


Robaina era un guajiro a la vieja usanza, pero también un científico natural, por eso siempre estuvo abierto a introducir los últimos adelantos y experimentar con nuevas semillas. Era un sabio. Decía que la zona de San Luis y de San Juan, en Vuelta Abajo, era la de mejor tierra del mundo para el tabaco, y por ello las hojas allí cultivadas sabían diferente y eran inigualables.


Como a Compay Segundo, la fama le llegó tarde, pero supo disfrutarla. En los últimos años de su vida viajó por medio mundo como embajador del habano, y bebió con artistas y princesas. Contaba que una vez, estando con el rey Juan Carlos, el cantante británico Sting se acercó a su mesa a pedirle un autógrafo, y también en su casa había recortes de entrevistas que le hizo The New York Times. Pero todo eso le daba risa, lo importante para él era defender sus plantas del moho azul y que sus capas siguieran siendo las mejores. En una ocasión, en Suiza, un periodista burlón le preguntó por qué al tabaco toscano no le picaba el bicho y al cubano sí. Antológica fue su respuesta. "Rápido le contesté: el bicho no come mierda".
                                           (El País M.Vicent)

sábado, 24 de abril de 2010

CARACAS EN LLANTO


"La violencia que se vive en las calles de la ciudad de Caracas fluye por todos los intersticios de su entramado social", explica Nelson Garrido, fotógrafo venezolano, premio Nacional de Artes Plásticas, que aborda desde hace años la violencia como fenómeno de orden estético y social. "Se trata de una violencia capilar que regularmente pretende ocultarse a través de los pliegues  cosmopolitas de una pretendida utopía de ciudad moderna. En Venezuela, particularmente en la ciudad de Caracas, vivimos ahogados por múltiples formas de violencia: violencia política, violencia de género, violencia intrafamiliar, violencia social, violencia económica. Y estas manifestaciones de la violencia rigen y condicionan nuestras vidas. Nosotros como sociedad no podemos seguir apelando a esconder y ocultar esta situación. Su ocultamiento no es sino una forma depurada y cínica que utiliza la propia violencia, sea cual sea y venga de donde venga, para continuar con sus prácticas de aniquilamiento de los modos de convivencia".

(Nelson Garrido fotos y opinión)

viernes, 16 de abril de 2010

TANGO Y ARRABAL



El tango es un arte de raíz suburbana, «arrabalero», derivado de su naturaleza popular. Surge y se desarrolla en los barrios de trabajadores que rodean a las ciudades rioplatenses: el «arrabal». Para el tango el arrabal es la musa inspiradora, el lugar de pertenencia que no se debe abandonar, ni traicionar, ni olvidar. Por sobre todas las cosas, el tanguero es un hombre (y una mujer) «de barrio». En el lenguaje del tango, el arrabal y el centro componen dos polos opuestos: el arrabal, muchas veces unido indisolublemente a los amigos y a «la vieja», expresa lo verdadero y lo auténtico, en tanto que el centro suele expresar lo pasajero, «las luces» que encandilan, el fracaso.

El sentimiento de pertenencia al arrabal ha llevado al tango a construir culturas de barrio, a darles personalidad. Sobre todo en Buenos Aires y Montevideo, el tango está indisolublemente ligado a la identidad de los barrios. La ciudad del tango es una ciudad vivida desde el arrabal.
 
"Te quiero con los ojos
cerrados, como los perros a
la gente"  Acho Estol

lunes, 12 de abril de 2010

LIBROS-NATURALEZA-AMOR



"El libro es como la cuchara, el martillo, la rueda, las tijeras. Una vez se han inventado, no se puede hacer nada mejor", sostienen Eco y Carrière en un libro que se titula osada y numantinamente Nadie acabará con los libros
C. Boyero

sábado, 10 de abril de 2010

COLOMBIA-MEDELLÍN-VALLEJO


"La vejez es el gran tema de la literatura"

 
"Uno no escribe lo que quiere, sino lo que puede", afirma el escritor colombiano, que volvió a su ciudad, Medellín, para escribir El don de la vida. Y allí, en el parque de Bolívar y en otros lugares, habla del "sentido del idioma", del dolor de los animales, de la vida y de la muerte."Desde la vejez se ve toda la vida humana"
Quiso escribir una novela sobre la muerte, sobre su muerte, "un tratadito sobre la vejez y sus miserias", y se sentó en un banco del parque de Bolívar, en el centro de la ciudad de Medellín, su ciudad, donde nació hace 67 años y por donde transitan sus 10 novelas, escritas todas en primera persona, todas alrededor de su vida y de la vida y la muerte de los suyos, de su hermano Silvio, que se pegó un tiro en la cabeza a los 25 años, o de su hermano Darío, con el que compartió sus primeros muchachos y al que vio morir en esta misma casa del barrio de Laureles. Tenía el propósito Fernando Vallejo de que El don de la vida se convirtiera en su última novela y que su epitafio literario fuese un libro lleno de dolor, de tristeza, de desastre, un libro sin insultos y sin malas palabras.
-Pero no lo logré. Uno no escribe lo que quiere, sino lo que puede.
Y no lo logró, según confiesa, porque al sentar a su protagonista en una banca de ese "parque desdichado de mendigos, prostitutos, prostitutas, chantajistas, estafadores, lustradores de zapatos, vendedores de lotería, expendedores de droga y travestis", su literatura fue invadida por el idioma de la vida, por el habla de Medellín. "Que es un habla llena de grosería", dice Vallejo, "y yo no puedo falsear el lenguaje".

domingo, 4 de abril de 2010

CARACAS

Si mis recuerdos de tí se han desvanecido,
¿por qué la noche pasada irrumpiste en mi sueño?
¿estás muerta, o estás loca? ¡No, no es posible!

sábado, 3 de abril de 2010

HONDURAS


"Bien vale perder un barco por conocer un puerto"


"Típico de mi madre. Es bellísimo, poético, nostálgico, no ocupa aclararlo: por la Gran Ilusión vale sacrificar algo o mucho." Así desentraña este dicho Julio Escoto, escritor hondureño.
                                                                  

viernes, 2 de abril de 2010

EL SUEÑO AMERICANO-USA


"Nadie jamás ha quebrado por subestimar
la inteligencia del público norteamericano"

"El dicho es cruel, pero jamás más certero que ahora. Sarah Palin, el movimiento Tea Party, los reality shows... Hay un público que fácilmente se deja convencer por las empresas petroleras y sus políticos que opinan que el cambio climático es nada más que una burla, como la reforma del sistema de salud. O las cínicas cabezas parlantes de cable o con los super-idiotas de Fox News. Vivimos sumergidos en lo que Saul Bellow, en otro dicho notable, calificó como el "Moronic Inferno"". Así se explica Francisco Golman, escritor norteamericano.

jueves, 1 de abril de 2010

CARTAS EN EL ASUNTO

Nadie debe considerarse competente en cuestiones literarias.
Es imposible encontrar una opinión más eficaz que la
crítica conciencia personal del propio autor.
El maestro Chéjov recomendaba:
Tachar sin piedad,
brevedad y
bordar sobre el papel.
Marco Aurelio, el emperador filósofo, aconsejaba:
Borrar la imaginación,
contener el impulso,
apagar el deseo y
sujetar las riendas...
Uno, en su modestia, se permite indicar a quienes preguntan:
Perdone usted a cuantos le han ofendido. Y póngase a
escribir. Sólo así, usted a solas, sabrá si sirve para ello.